Los ciudadanos de Hong Kong se han llevado una auténtica sorpresa al encontrar en las marquesinas de los autobuses unos carteles con tres retratos robots. Se trata del aviso que lanzan las autoridades de la ciudad asiática para dar a conocer el probable aspecto que tienen algunas de las incívicas personas que ensucian las calles.
El gobierno de la ex colonia británica encargó a un laboratorio que tomase muestras genéticas de los desechos que ensucian las calles hongkonesas. Gracias a ellas los tecnicos elaboraron unos fenotipos que les permitieron crear reprentaciones visuales aproximadas de las personas que arrojaron dichos restos. Y, concretamente, los tres retratos robots que aparecen en los carteles pertenecen a los tres suejtos cuyos restos de ADN se encontraron en más ocasiones.
Las autoridades planean ahora cruzar los datos obtenidos de las pruebas genéticas con los que se tienen de los habitantes de cada distrito, para tratar de identificar a los infractores. Por supuesto, esto no tendrá consecuencias legales para dichas personas, pero la idea de revelar la identidad de quienes ensucian las calles lo que pretende es avergozar a los culpables y someterles a escarnio público. "No tires basura o tu podrás ser el siguiente rostro", es el lema de esta campaña para tratar de combatir las actitudes incívicas. ¿Dará resultado?